Publicado 24/07/2024 13:15

ARGENTINA.- Estudio revela que el olor del estrés humano altera las emociones de los perros

Archivo - El olor del estrés humano afecta a las emociones de los perros, según un estudio
Archivo - El olor del estrés humano afecta a las emociones de los perros, según un estudio - UGR - Archivo

ARGENTINA, 24 Jul (EUROPA PRESS)

Un reciente estudio realizado por la Universidad de Bristol y publicado en Scientific Reports reveló que los perros pueden verse afectados emocionalmente por el olor del estrés humano, resultando en decisiones que reflejan una actitud más "pesimista". Investigadores de la Facultad de Veterinaria de Bristol exploraron cómo las mascotas reaccionan ante los olores que generan estrés o relajación en las personas, encontrando que el estado emocional y de aprendizaje de los canes cambia en respuesta a estos estímulos olfativos.

Para llegar a estas conclusiones, el estudio involucró a 18 parejas de perros y sus dueños en pruebas que medían la reacción de los animales ante diferentes olores humanos. Mediante un método que distingue entre comportamientos "optimistas" y "pesimistas", los perros fueron enseñados a diferenciar el sitio de una golosina de otro que estaba vacío. Después, se midió la velocidad de su acercamiento hacia ubicaciones nuevas y ambiguas respecto a donde podrían encontrarse los recipientes.

Los resultados mostraron que, bajo la influencia del olor humano causado por el estrés, los perros tendieron a aproximarse de manera más lenta a los nuevos lugares, indicando mayor pesimismo. Este comportamiento no se observó cuando el olor estaba asociado a la relajación. Tal descubrimiento sugiere que el aroma del estrés puede aumentar la expectativa de los perros de no encontrar comida en el nuevo sitio, de forma similar a su aprendizaje con el recipiente vacío.

Según la Dra. Nicola Rooney, profesora titular de Vida Silvestre y Conservación en la Facultad de Bristol, este estudio no solo comprueba la profunda conexión emocional entre perros y humanos, pero también demuestra que el estrés humano puede impactar de manera significativa en la percepción y el aprendizaje de las mascotas, filtrándose a través del ambiente: "Los dueños de perros saben la sintonía en la que están sus mascotas con sus emociones, pero aquí demostramos que incluso el olor de un humano estresado y desconocido afecta el estado emocional del perro, su percepción de recompensas y su capacidad de aprender. Los adiestradores de perros de trabajo suelen describir el estrés que se transmite por la correa, pero también hemos demostrado que puede viajar por el aire". Este vínculo olfativo entre las emociones humanas y la respuesta emocional de los perros abre nuevas avenidas para entender cómo nuestros estados anímicos pueden afectar a nuestros fieles compañeros.