ARGENTINA, 4 Oct (EUROPA PRESS)
Científicos lograron tomar mediciones casi diarias del campo magnético global de la corona solar, avanzando significativamente en la comprensión de las tormentas solares que pueden impactar las tecnologías en la Tierra. Este hito se alcanzó gracias al uso del instrumento Polarímetro Coronal Multicanal Mejorado (UCoMP), y los hallazgos fueron publicados recientemente en Science.
Por primera vez, se pudo observar el campo magnético de la corona solar, una parte del sol que hasta ahora había eludido las observaciones detalladas, con una regularidad sin precedentes. Este avance es crucial, dado que el campo magnético solar juega un papel fundamental en la generación de tormentas solares, las cuales representan riesgos para la red eléctrica, los sistemas de comunicación y tecnologías como el GPS.
El estudio del campo magnético solar se dificultaba por los desafíos inherentes a la observación de la corona solar, la capa más externa de la atmósfera solar. La técnica tradicional, que requiere equipos grandes y costosos, limitaba las observaciones a pequeñas secciones de la corona. No obstante, la combinación de sismología coronal y las observaciones de UCoMP permitió a los investigadores obtener imágenes completas y consistentes de la corona global.
Zihao Yang, autor principal del estudio, enfatizó la importancia de este avance, señalando que "El mapeo global del campo magnético coronal fue una parte importante que faltaba en el estudio del Sol". Este progreso representa un paso significativo hacia la comprensión de los campos magnéticos coronales y su papel en las tormentas solares que tienen el potencial de afectar la Tierra.
El equipo de investigación, compuesto por científicos de la Universidad de Northumbria en el Reino Unido, NSF NCAR en EE.UU., la Universidad de Pekín en China, y la Universidad de Michigan, produjo 114 mapas del campo magnético entre febrero y octubre de 2022, logrando una visión casi diaria de este fenómeno.
Además, las observaciones revelaron, por primera vez, mediciones del campo magnético en las regiones polares del Sol, que tradicionalmente se han mantenido fuera de alcance debido a la geometría de la observación desde la Tierra. La mejora en la calidad de los datos, junto con el estado de máxima actividad solar, facilitó la captación de esta información crucial.
Este avance introduce una nueva era en la investigación de la física solar, marcando el camino para una mejor predicción y comprensión de las tormentas solares y su impacto en nuestro planeta.