ARGENTINA, 23 Oct (EUROPA PRESS)
En un giro reciente de los eventos que eleva la tensión entre Arm y Qualcomm, la firma británica Arm decidió cancelar la licencia que otorgaba a la gigante estadounidense Qualcomm para usar su diseño de chips. Este conflicto comenzó en el año 2021 cuando Qualcomm adquirió Nuvia, una compañía especializada en el diseño de procesadores para centros de datos, fundada por exejecutivos de Apple. La adquisición de Nuvia, que contaba con una licencia de Arm, le permitió a Qualcomm empezar el desarrollo de chips Arm propios, específicamente para ordenadores.
Arm interpretó esta maniobra como una violación a la licencia otorgada a Qualcomm, exigiendo la destrucción de los diseños de Nuvia anteriores a la adquisición bajo la premisa de que no podían ser transferidos sin autorización previa. Esta disputa escaló cuando Arm presentó una demanda en 2022 acusando a Qualcomm de infracción de contrato y de marca.
La cancelación de la licencia, comunicada por Arm a Qualcomm, entraría en efecto en un plazo de 60 días, según un documento al que tuvo acceso Bloomberg. La medida intensifica la contienda entre las dos potencias tecnológicas, poniendo en entredicho las futuras relaciones y colaboraciones.
Qualcomm, por su parte, criticó duramente la acción de Arm, interpretándola como un intento de dañar la relación entre ambas compañías y perturbar el proceso legal en curso. Un portavoz de Qualcomm manifestó que veían la notificación de rescisión como completamente sin fundamento y una estrategia para presionar a un socio de larga data.
El desenlace de esta disputa legal podría tener implicaciones significativas en el mercado de semiconductores y en el desarrollo futuro de la tecnología de procesadores, particularmente en lo que respecta a la innovación y la colaboración entre estas empresas líderes en el sector.