MÁLAGA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, en una operación conjunta con agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, han aprehendido 720 kilos de cocaína en el interior de un contenedor que llegó al puerto de Málaga a finales del pasado mes de septiembre procedente de Costa Rica.
La droga estaba dispuesta en paquetes rectangulares de 1,2 kilos y escondida en una caja metálica que, a su vez, había sido colocada entre escombros y residuos de aluminio que superaban las 19 toneladas de peso.
Han sido detenidas ocho personas, entre las que se encuentran varios individuos conocidos por su relación con el crimen organizado y el tráfico de drogas, han indicado en un comunicado. De hecho, dos de ellas ya habían sido detenidas y condenadas por hechos similares en el puerto de Algeciras en 2018.
Las investigaciones se iniciaron tras tener conocimiento los investigadores de la existencia de una organización asentada en el Campo de Gibraltar que estaría introduciendo grandes cantidades de cocaína oculta en chatarra.
Las fuerzas actuantes sometieron a la organización a una estrecha vigilancia a lo largo de varios meses, adoptando distintas medidas de investigación autorizadas por el Juzgado Mixto número 3 de San Roque (Cádiz).
El estudio y análisis de las actuaciones se centraron en una sociedad exportadora de Costa Rica que había sido objeto de investigación en años anteriores por su vinculación con el tráfico de cocaína mediante contenedores.
Así, cuando tuvieron conocimiento de la llegada de nuevos contenedores al puerto de Málaga a finales de septiembre, las investigaciones apuntaron a que podría ocultarse sustancias estupefacientes en algunos de ellos, por lo que los agentes llevaron a cabo una monitorización completa de los mismos.
El pasado 9 de octubre cuando, tras un exhaustivo control sobre varios contenedores a la salida del puerto de Málaga, uno de ellos se desvió de su trayecto programado, entrando en una finca cercana a una zona boscosa de difícil vigilancia en la localidad gaditana de Alcalá de los Gazules.
Esta maniobra hizo sospechar a los responsables de la investigación, motivo por el cual se procedió a la entrada y registro de la nave donde se encontraba el contenedor.
Una vez descargado el contenedor, se observó entre la chatarra una caja metálica de grandes dimensiones, la cual ocultaba en su interior los 720 kilos de cocaína.
De manera simultánea se procedió a la detención de ocho de los implicados en la operación y se llevaron a cabo nueve registros domiciliarios donde se intervino dinero en efectivo, un uniforme de la Guardia Civil, un detector de frecuencias y dos relojes de alta gama, además de diverso material informático y documentación.
Para el desarrollo de la actuación se contó igualmente con la participación de efectivos de grupos especializados GOIT de la Policía Nacional y los GAR de la Guardia Civil.
Las indagaciones practicadas por los investigadores permitieron constatar ramificaciones de esta trama en la Costa Tropical de Granada, concretamente en las localidades de Motril y Almuñécar.
La operación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción Mixto número 3 de San Roque (Cádiz) y llevada a cabo por grupos de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria de Málaga, investigadores de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), así como de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) y Unidad de Estupefacientes de Marbella de la Policía Nacional.