MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente de Costa Rica y premio Nobel de la Paz, Óscar Arias, instó este viernes a los países reticentes a reconocer el Gobierno del presidente de Honduras, Porfirio Lobo, a "comparar" las violaciones de Derechos Humanos en el país centroamericano con las de Cuba y a desechar esa excusa para retrasar el restablecimiento de las relaciones de Tegucigalpa con la región.
Interrogado acerca de la credibilidad que le merecen las denuncias sobre violaciones de Derechos Humanos en Honduras después de las elecciones de noviembre que supuestamente pusieron fin a la crisis política derivada del golpe de Estado, Arias aseguró que "todo es relativo" y exhortó a sus autores a realizar una comparación con otros países de la región.
"Todo es relativo después de Einstein. Comparen las violaciones de los Derechos Humanos en Honduras con las violaciones de los Derechos Humanos en Cuba", dijo el ex mandatario en la conferencia 'Al Servicio de la democracia, la paz y el desarrollo' que ofreció en la sede de la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB) en Madrid.
Con estas palabras el Premio Nobel de la Paz reiteró una vez más su apoyo al Gobierno de Lobo, que muchos países de la región consideran ilegítimo por ser el resultado de unos comicios auspiciados por el régimen interino que ocupó el poder en Honduras tras el golpe de Estado del pasado 28 de junio.
Frente a este argumento, el costarricense destacó el carácter democrático de dichas votaciones y de nuevo animó a los escépticos a comparar este proceso electoral con los de otros países del subcontinente.
"Las elecciones fueron transparentes, fueron limpias. Nadie ha pronunciado la palabra fraude con respecto a esas elecciones, así es que yo no veo cómo alguien se puede lamentar de que esas elecciones no legitiman al triunfador y al actual Gobierno de Porfirio Lobo cuando guardan silencio respecto a países que no tienen elecciones o que tienen elecciones no tan transparentes", agregó.
Además, el ex dirigente insistió en los efectos que este conflicto diplomático está teniendo sobre la población hondureña, una de las más empobrecidas del hemisferio sur del continente, ya que la cuestión del reconocimiento a Lobo ha suspendido el flujo de la ayuda internacional que hasta ahora servía de sustento al país centroamericano.
"Seguir desconociendo al régimen de Porfirio Lobo no es un castigo para él, es un perjuicio para el pueblo hondureño y que no se merece porque mientras no se restablezcan las relaciones diplomáticas que tenían antes del 28 de junio no se va a poder restablecer toda la cooperación que se venía dando al Gobierno hondureño", comentó.
Asimismo, Arias subrayó la importancia de que se haya constituido la Comisión de la Verdad y Reconciliación Nacional que aparecía recogida en el llamado Acuerdo San José-Tegucigalpa, impulsado por Costa Rica, y se refirió a este hecho como "un primer paso muy significativo".
"Me alegro mucho de que se haya establecido la comisión de la verdad con gente muy íntegra de diferentes partes del mundo. Ellos se encargarán de diagnosticar lo que aconteció antes y después del golpe", apostilló.
FUTURO DE ARIAS
Cuestionado acerca de su futuro como referente político para Latinoamérica tras abandonar hace unos meses la presidencia de Costa Rica, el ex mandatario anunció que creará un órgano para la resolución de conflictos que tendrá su sede en San José y que se apoyará en la fundación que creó con el dinero del Premio Nobel de la Paz.
"He escogido permanecer la mayor parte del tiempo en mi país porque quiero establecer un centro de resolución de conflictos y para ello voy a necesitar recursos", indicó Arias quien confió en conseguir estos fondos a través de su labor de concienciación en diferentes países.
"Es inevitable que se me invite a conferencias que se me otorguen doctorados honoris causa que sea expositor de mis ideas por diferentes temas por todas partes del mundo", explicó.