ARGENTINA, 31 Oct (EUROPA PRESS)
El gobierno argentino enfrentó una polémica reciente con la remoción de Diana Mondino de su puesto como ministra de Exteriores, decisión defendida firmemente por el principal portavoz del presidente Javier Milei. Mondino fue desplazada de su cargo luego de que Argentina emitiera un voto en la Asamblea General de la ONU a favor del levantamiento del embargo a Cuba, desviándose de las instrucciones originales de votar "no", alineándose así con Estados Unidos e Israel.
"Ha incumplido las directrices del jefe de Estado", afirmó el portavoz Manuel Adorni, resaltando la importancia de seguir la "posición clara" del presidente, especialmente en temas sensibles como los relacionados con Cuba. Adorni evitó detallar el nivel de comunicación que hubo entre la presidencia y la Cancillería previo al controversial voto, enfatizando que en el gabinete, la consigna es cumplir con las políticas marcadas por el presidente.
La salida de Mondino de la Cancillería se ve como una señal clara de la rigurosa expectativa de alineación dentro del equipo de Milei. "Lo que dice el presidente se hace", remarcó Adorni, indicando que cualquier discrepancia con esta norma resultará en la invitación a abandonar el gobierno.
Para reemplazar a Mondino, fue designado Gerardo Werthein, quien ocupaba la posición de embajador en Estados Unidos, dejando pendiente el anuncio de su sucesor en el mencionado cargo diplomático. Este cambio en la Cancillería refleja el firme propósito del gobierno de Milei de mantener una línea coherente y decidida en su política exterior, marcando un precedente significativo en la gestión de las relaciones internacionales de Argentina.