MADRID 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los nuevos aranceles promovidos por la Administración Trump no sólo erosionan el crecimiento y la estabilidad globales, sino que también debilitan los pilares sobre los que se ha construido el liderazgo económico de Estados Unidos, según se desprende de un nuevo artículo publicado por BBVA Research, en el que también se destaca que dicha política proteccionista pone en riesgo el sistema económico global.
En concreto, el responsable de análisis económico del servicio de estudios de BBVA, Rafael Doménech, ha explicado que, durante décadas el éxito económico estadounidense se ha basado en la apertura comercial, la confianza a los inversores exteriores, la previsibilidad y las entradas de capital, que hacían que el dólar fuera un "activo de refugio".
Sin embargo, ante dicha coyuntura, el artículo apunta que el reto para Europa y el resto del mundo no es replicar el proteccionismo, sino "reforzar el multilateralismo y preservar un orden internacional basado en reglas".
FALTA DE LÓGICA ECONÓMICA
"Lo que está en juego no es sólo el comercio, sino la credibilidad del sistema económico global", ha enfatizado Doménech, que ha manifestado que la batería de aranceles anunciada por el Gobierno de Trump sorprendió "tanto por su magnitud como por su falta de lógica económica".
En este sentido, la publicación ha detallado que la estrategia comercial de la Casa Blanca pretende reducir los déficits comerciales bilaterales de EE.UU. hasta hacerlos desaparecer, lo que, según BBVA Research, además de "difícilmente inalcanzable, refleja un diagnóstico equivocado".
"La obsesión con mantener déficits comerciales bilaterales nulos carece de sustento teórico en una economía global integrada, ignorando los avances de la ciencia económica en más de dos siglos", comenta el experto, para luego añadir que la idea de que EE.UU. deba tener una balanza comercial de bienes equilibrada con cada uno de sus más de 100 socios comerciales "sólo tendría sentido en un escenario con dos únicos países y sin comercio de servicios".
"NORMAL" QUE EXISTAN DÉFICITS EN EL COMERCIO DE BIENES
En esta línea, el servicio de estudios de la entidad financiera expresa que, en el mundo actual, con cadenas globales de producción distribuidas entre muchos países, es "normal" que existan déficits en el comercio de bienes con algunos países, que se compensan, parcial o totalmente, con superávits con otros mediante el comercio de bienes diferentes o de servicios.
"El comercio internacional permite a los países aumentar su bienestar especializándose en aquellas partes de las cadenas mundiales de producción en las que son relativamente más competitivos", ha afirmado Doménech, que ha enfatizado que el déficit de la balanza por cuenta corriente (que incluye bienes y servicios) "no es necesariamente un inconveniente", ya que se olvida que ese desequilibrio refleja igualmente un exceso de inversión sobre el ahorro.
Así, EE.UU. presenta déficits externos recurrentes no porque esté siendo explotado por otros países, como alega Donald Trump, sino porque su economía "ofrece activos seguros y rentables que atraen el ahorro del resto del mundo".
CAPITAL EXTRANJERO FINANCIA LA INVERSIÓN ESTADOUNIDENSE
"El capital extranjero, en general proveniente de países con menores niveles de renta per cápita, financia la inversión, el consumo y el crecimiento estadounidenses, reflejo hasta ahora de la solidez institucional, de su fortaleza en investigación y desarrollo, de su innovación y de la profundidad de sus mercados financieros", indica BBVA Research, que hace hincapié en que, precisamente como resultado de dicha situación, el país "es un líder mundial en tecnologías disruptivas".
Además, la productividad y renta per cápita de EE.UU. no sólo son superiores a la mayoría de las economías europeas, sino que desde la Gran Recesión ha ido aumentando la distancia con ellas. Por último, Doménech asegura que la fórmula utilizada para calcular los 'aranceles recíprocos' ha generado "duras críticas" entre expertos y en la comunidad académica".
"En lugar de aplicar aranceles similares a los que imponen los países a las exportaciones de EE.UU., se basa simplemente en un arancel mínimo del 10% y, a partir de ese nivel, se divide el déficit bilateral por el valor de las importaciones de cada país en 2024, aplicando la mitad del resultado así obtenido", ha relatado el experto, que ha terminado concluyendo que, como respuesta a tal giro proteccionista, la reacción de los mercados está siendo "contundente, ya que las bolsas estadounidenses sufrieron caídas superiores al 5% y la pérdida de riqueza en sólo dos días fue de 6,6 billones de dólares, que equivale al 24% del PIB de EE.UU. en 2024".