ARGENTINA, 22 Oct (EUROPA PRESS)
El Girona FC registró una victoria histórica por 2-0 frente al Slovan Bratislava en Montilivi, durante la tercera jornada de la fase de liga, aunque su técnico, Míchel Sánchez, expresó sus dificultades para adaptarse a la acelerada dinámica de la Liga de Campeones, algo distante de su método de trabajo habitual. "Va todo demasiado rápido para mi forma de trabajar en el día a día", confesó Míchel a Movistar Plus+ al término del partido.
Se enfrentan a un calendario apretado agudizado por la Eurocopa, la Copa América, una serie de altas y bajas en el equipo, y una pretemporada que no brindó el margen deseado para la preparación óptima con los jugadores. La estrategia del entrenador para mantener a su equipo a flote incluye un enfoque intensivo en el análisis de vídeo y reuniones individuales con los jugadores, buscando consolidar la integración de las nuevas adquisiciones, claves para el éxito de la temporada.
Adicionalmente, el equipo se ve presionado por un número significativo de lesiones, lo que limita las opciones de Míchel para rotar y refrescar su plantilla. A pesar de estas adversidades, el técnico se muestra orgulloso, especialmente tras lograr su primer triunfo en la Champions League, subrayando el compromiso y la entrega de su plantel, incluso con poco margen de maniobra.
La situación del Girona se ve más complicada ante las recientes molestias sufridas por Iván Martín y Donny van de Beek frente al Slovan, justo antes de un intenso calendario que incluye enfrentamientos contra Las Palmas, en la Copa, Leganés, otro encuentro de Champions y luego Getafe. Míchel Sánchez se mantiene esperanzado y agradecido por el esfuerzo de su equipo, destacando la importancia de la recuperación física en este periodo crítico, confiando en la capacidad de sus jugadores para seguir compitiendo al más alto nivel, en honor al apoyo de la afición.