ARGENTINA, 7 Jan (EUROPA PRESS)
Argentina lanzó fuertes acusaciones contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por afirmar que el gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo, detenido y procesado en Venezuela desde diciembre pasado, pretendía "atentar contra la vida" de la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez. La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, expresó en X, antigua Twitter, su discrepancia con estas afirmaciones: "Escúchame bien, Maduro: tus mentiras no te van a salvar. Acusar sin pruebas a Nahuel Gallo de un complot ridículo solo expone la desesperación de tu régimen asesino, que está llegando a su fin. Al delirio de un asesino de su propio pueblo no hay palabras con que responderle. ¡Liberá a Nahuel ya!".
Por otro lado, Manuel Adorni, portavoz del Ejecutivo argentino, también utilizó X para cuestionar la postura del mandatario venezolano, tachándolo de "profundamente mentiroso" y destacando la naturaleza dictatorial y cobarde de su gobierno.
Las acusaciones de Maduro se basan en supuestos "vínculos con el terrorismo" del suboficial de Gendarmería, argumentando que Gallo tenía "planes específicos para atentar contra la vida de la vicepresidenta, Delcy Rodríguez". Maduro desmintió rumores sobre motivos personales del argentina para entrar a Venezuela, afirmando que "Es mentira que (Gallo) tenía una novia aquí".
El gobierno de Javier Milei no solo repudió las acusaciones, sino que también tomó acciones legales internacionales, solicitando medidas cautelares para Gallo ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y denunciando a Venezuela ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) por "detención arbitraria" y "desaparición forzada" de Gallo, describiendo estos hechos como violaciones graves a los derechos humanos.
Esta escalada de tensiones entre Argentina y Venezuela pone de manifiesto las profundas divergencias entre ambos países respecto al tratamiento de los derechos humanos y la diplomacia internacional.